martes, diciembre 12, 2006

Los humildes


Los humildes no pudieron dormir anoche
por el ruido de los Lamborghinis…

Pero a esta hora se bañan
echándose agua con un jarrito

Los humildes soplan sobre el rostro de sus hijos
para vencer el calor
…y todavía encienden velas
para buscar sus sonrisas debajo de la cama

A los humildes, le faltan dientes
pero a ustedes les sombran caries en el alma…

Los humildes tiemblan de hambre un día
pero ustedes tiemblan de miedo toda la vida…

…y no pueden dormir por el ruido
de tanta gente que se acostó con hambre
para que mañana ustedes aceleren sus ataúdes de lujo…

Los humildes hoy están muertos
pero de la risa…

Y ustedes están muertos por ignorar la vida…


Evan Lewis
Santo Domingo

lunes, diciembre 11, 2006

Madre

De todos los recuerdos,
hay uno que todavía me golpea la frente con su piedra azul
y me hace sangrar…

Cuando llueve, ya no escucho su voz...
“Hijo, sal a mojarte, antes de que esos poemas te quemen la cara”…

He querido despertar de esta nostalgia,
pero me faltan sus manos para limpiarme el alma…

Y ahora que ya no están sus rodillas cansadas
donde escribí mis primeros versos…

...su recuerdo,
es lo único vivo,
dentro del fantasma dormido de mi corazón…

Evan Lewis
Santo Domingo

Ynra

Tus pies
son el inicio
de un mar olvidado
Tus pies están aquí
en mi espalda
vienes intacta de ese viaje
por los poros del sueño
Mi guerra es inútil
sin tus armas
La casa de la tarde
Ynra
te retiene...

Evan Lewis
Santo Domingo 1983

viernes, diciembre 08, 2006

El testamento de Jesús

Ustedes son los poetas que merecen vivir
El hombre escribió su historia en las palmas de mis manos
y la leí llorando, con mi sangre…

Desde mi cruz dejo en el viento estas palabras ciegas…

Ustedes son los poetas que merecen vivir
Le cantan al amor como si bebieran
de un vino hecho con trozos de alma pura…

Que el amor no se ahogue en su ausencia
Que la vida jamás sea el río que desborda la soledad
Que no se quemen los árboles que dejan a su paso cada beso
en el rostro de los enamorados…

Mi destino fue escrito por alguien que desconozco...

Ustedes son los poetas que merecen vivir
Algún día, buscaré mi rostro en su poesía

Y si en vez de paz encuentro niños muertos
por el hombre, por el hambre
Sabré que mi padre también me abandonó en mi último deseo…

Evan Lewis
New York City

martes, diciembre 05, 2006

Pan tostado en España

Para resucitarlo,
busco en mi sangre al fantasma de una Ñ…
Para deletrear su alma
como si fuera una palabra que unifica, que da vida…

Quiero que me ayude a entender por qué
ahora es cuando dan fruto los árboles
que olvidé en el fondo de un gran sueño…

Quiero pedirle algunas explicaciones, a su merced, la Ñ…

Que me diga por qué el tiempo ahora transcurre
como si fuera una paloma herida…
y qué pasará con la nostalgia
cuando ya no pueda peinarse con mis dedos.

Dónde echaré esta pena que acaricié como un perro sin cola,
y alimenté con versos

Y con mis peces, Dios mío, ¿emigrarán conmigo?
En sus aguas escribo canciones para niños pobres, sin cama…
Quiero llevármelos…

A esta hora, el hielo del adiós se derrite en mi frente
y es un té que bebo, poco a poco…

Evan Lewis
New York City

sábado, diciembre 02, 2006

Mi corazón todavía se muere por latir…

Saqué las tachuelas de mi cama
para poder decirte estas palabras, Peregrina
Abrí mis páginas, como un libro que rechaza la luz…
Pero la tierra se tarda en descansar
y no puedo respirar estas palabras, Peregrina.
Nadie me vio caer, pero la montaña sigue en llamas
y mientras tú asesinas sorbo a sorbo un mate,
mi corazón atrapa letras en el aire,
para poder quemar estas palabras, Peregrina.
Aunque quisiera, no podré mirarte fijamente,
donde hubo flores verdes,
la noche dibujó nidos de buitres amarillos…
y nada veo mientras caigo, Peregrina.
Busca en la sombra de una cruz
el por qué de esta melancolía,
Y si algún día, abres este libro,
y cierras tu rostro en mi alma,
sentirás que mi corazón todavía se muere por latir…


Evan Lewis
New York City.